martes, 29 de agosto de 2006

Aquella noche


Todo tiene un inicio aunque no se si una continuación...ahora mismo me encantaría regresar a aquellos días, mejor regresar a aquellas noches donde todo resultaba tan excitante y daba tanto miedo a la vez

Yo era bastante inocentón en muchos aspectos y en el tema sexo especialmente, estaba pez totalmente, mi hermano tiene 2 años mas que yo y es lo que se dice un "echao pa lante" inteligente, guapo, atlético, simpático... yo ni sabia lo que era hacerse pajas, es curioso como se cambia en 3 años, ahora se puede seguir siendo inocente pero... menos.

Vivimos en un piso de 3 habitaciones, el dormitorio grande para mis padres, la habitación que da a la calle para la abuela y la otra que da atrás para mi hermano y para mi, una noche escucho ruidos raros en la cama de mi hermano, no eran tan extraños ya que algunas veces antes lo había escuchado pero no se esa noche me llamaron especialmente la atención y no porque fuesen muy escandalosos o algo así, por la ventana entraba algo de luz de las farolas en la calle, así que fijando la vista vi a mi hermano estirado sobre su cama, el edredón bajado hasta los tobillos, la camiseta hacia arriba y el pantalón de pijama bajado también, vi como su mano subía y bajaba rítmicamente a la altura de su pito, su respiración algo acelerada, confieso que sentí una mezcla de miedo, sorpresa, y algo raro dentro de mi, ya que por intuición sentí algo como excitación, mi corazón comenzo a latir deprisa, aquella noche a pesar de que conocía esos extraños ruidos en la cama de mi hermano algo resultaba diferente ya que nunca había visto nada, fije mas la vista, levante la cabeza con cuidado e intuí una cosa grande entre las piernas de mi hermano, muchas veces lo había visto en bolas, cambiándose, en la ducha, pero siempre con la polla blanda, así que seguí mi observación, al tiempo que mi pito reacciono también, el seguía frotándose la polla, suspirando, y en unos minutos pareció relajarse, se subió el pijama, se tapó con el edredón y se dio la vuelta, yo estaba alucinado, y decidí espiarle a ver que era eso que hacia. Lo vi hacérselo un par de veces mas y una noche que yo estaba acostado y el llego para irse a dormir le solté de golpe que me explicara que era eso de hacerse una paja, el soltó una risa y me dijo que era un crío, yo insistí y le confesé que creía saberlo, que lo había visto por las noches frotarse el pito, el se enfado algo pero continuo quitandose la ropa, se puso el pijama y se tumbo en la cama, yo le dije que vaaa hombre que me lo contara, el no quería pero note su voz que se hacia como rara, nos quedamos en silencio unos minutos y al rato me dice que si que vale, me dijo que me tumbara con el sobre su cama pero que antes cerrara la puerta bien, yo lo hice y me tumbe junto a el, apago la luz, pero antes me di cuenta que entre sus piernas se le notaba un gran bulto. El me dijo que era muy fácil, se veía por la luz de la ventana, me dijo que cuando se te pone el pito duro y tienes ganas haciendo unos movimientos da mucho gusto

Con aquella frase... si tienes ganas con unos movimientos da mucho gusto... se abrió todo un mundo, algo que me acompañaría hasta hoy, algo que no pienso dejar claro esta...

Mientras lo decía se empezó a tocar por encima, acariciándose el pakete, yo estaba admirado, luego se bajo el pijama y vi de cerca su polla, cubierta de pelos, grande, palpitante... me dijo como se agarraba y que le mirase a el pero estaba claro que no iba a dejar de mirarle, comenzó el movimiento, rítmico, se humedeció la mano con saliva y la paso por su rabo, me dijo que si quería probar, yo estaba cortado, me dijo no te cortes hombre mientras me acariciaba la pierna y subía hacia mi pakete, puso la mano encima y xD!!! sentí como corriente, me dijo susurrando que me lo sacara, pero yo no quería, en insistió y yo tonto de mi casi me levanto para irme, pero mientras discutíamos metió la mano por dentro del pijama agarrándome la polla, me calmo y me dijo tocármela tu también a mi y veras que gusto, me cogió la mano y la llevo hasta su polla que me pareció inmensa, luego se incorporó un poco y me bajó de golpe el pijama saliendo a la luz mi pollita dura, y comenzó a pajearme, paso algo de rato y sentí como un hormigueo en todo el cuerpo, una sensación rara y placentera que hizo que moviera las piernas espontáneamente pataleando, mi primer orgasmo buscado y gracias a mi hermano!! el siguió un rato dándole al suyo y se corrió, quedamos un rato los 2 tendidos sobre su cama, en silencio, no hablamos del tema, pero desde entonces se creo como un morbo en el hecho de irse a dormir, yo deseaba repetir pero no me atrevía.... unas noches después cuando todo estaba en silencio me pregunto si quería repetir aquello, le dije bueno, y se levanto, y aparto la ropa de la cama y me di cuenta que estaba solo en calzoncillos, antes de meterse en mi cama se los quito y me quito el pijama, se tumbo junto a mi y me comenzó a tocar y yo igual... pasaron meses y repetimos de tanto en tanto hasta que sin saber muy bien como poco a poco dejamos de hacerlo... hasta hace unas semanas que sin buscarlo pasó...

No hay comentarios: